martes, mayo 03, 2016

Labs en modo cultura digital

Cuando pienso en laboratorios para explorar juntos, imagino siempre los laboratorios propios de la cultura digital. Esos espacios efervescentes en donde confluyen preguntas e intereses similares desde diferentes y diversas habilidades, profesiones, experiencias e historias, y en donde lo que se produce se ABRE. Para un proyecto modo LAB :-) entre diferentes instancias de ITESO hicimos una recapitulación de los antecedentes del mundo de las labs. Les dejo para masticar la idea esto que tiene de Toret, de Rossana y mío:


El concepto de laboratorio es tan antiguo como la búsqueda humana. El laboratorio ha sido tradicionalmente un espacio para llevar a cabo experimentos para aprender, para descifrar el mundo y para producir. Institucionalizados en la modernidad, los laboratorios se relacionan con la investigación científica y sus métodos. Con la aparición de los movimientos libres y open, de la cultura hacker y la apropiación del DYI (Do It Yourself, hazlo tú mismo) la ciudadanía retoma el concepto y aparecen con fuerza laboratorios con metodologías alternativas a las institucionalizadas, en donde lo comunitario, el hacer con otros, la tecnología y en especial, la producción y procesos abiertos son clave distintiva. Las mismas instituciones, como por ejemplo el MIT, incursionan en algunas de estas claves, generando espacios de exploración colectiva y multidisciplinar, aunque no siempre abierta. A mediados de los 80tas e inicios de los 90tas aparecen los HackLabs, los FabLabs y los MediaLabs. Estos modelos van tomando fuerza y extendiéndose en la presente década conforme las tecnologías digitales y las lógicas colaborativas, descentralizadas, abiertas y auto-organizadas propias de las redes, van permeando la vida humana. Los ciudadanos encuentran valor en los saberes producidos por otros ciudadanos, valor en la propia voz y van apropiándose del conocimiento y de las formas de producirlo colectivamente y en red al margen de los sectores tradicionales de producción.
Las características que comparten los LABs contemporáneos, ya sea de factura institucional (académica, gubernamental) o ciudadana son:
  • El trabajo es en directo, “live”.
  • El actuar con el conocimiento es siempre práctico. Es experiencia situada hecha en directo.
  • Los espacios son multidisciplinares/interdisciplinares/transdicisplinares
  • Los espacios son heterogéneos, incluyen desde principiantes hasta expertos, profesionales, amateurs, conocedores desde la vivencia, etc.
  • La actividad es individual y es colectiva al mismo tiempo.
  • Se hace con otros. Se parte de conocimiento, de trabajo ya hecho por otros y se aporta a todos.
  • Cualquiera puede sumarse, retomar o partir a otra exploración desde cualquier punto.
  • Se favorecen los prototipos, el beta permanente. Se prioriza lo tentativo, lo experimental, la apertura al error y a lo posible, sobre llegar a un producto acabado y perfecto.
  • Son espacios para socializar, encontrarse con otros, desde la pasión.
  • Son espacios que buscan configuraciones novedosas para favorecer ecosistemas creativos.
  • Hay una base digital.
Otras características, más propias de los LABs ciudadanos y a las que nosotros como ITESO apostamos son:
  • La organización y operación es comunitaria y horizontal
  • La búsqueda por formas de innovación social y tecnológica, con especial atención a problemáticas no resueltas y comunidades desfavorecidas.
  • La búsqueda por creación de tendencias de producción cultural, comunicativa, tecnológica, educativa y/o política alternativas.
  • Procesos y productos bajo perspectivas libre y open, que aporten al pro-común mediante la creación de knowlege commons.
Y más una perspectiva mía: 
  • La creación de líneas de investigación bajo marcos alternativos de producción de conocimiento, uno menos especializado, más transdisciplinar y co-creado con todos, reconociendo el valor de la llamada ciencia ciudadana.



lunes, abril 11, 2016

Brockbank & McGill, y el aprendizaje reflexivo universitario

Mis notas sobre el libro:  
Brockbank, Anne y McGill, Ian  (1998). Facilitating Reflective Learning in Higher Education, Buckingham, UK: SRHE y Open University Press.
[Originalmente había leído el libro en español: Brockbank, Anne y McGill, Ian  (2002). Aprendizaje reflexivo en la educación superior, Madrid: Ediciones Morata.]

  • Postura del aprendizaje de corte constructivista. Centrado en en el sentido de la formación universitaria, y desde ahí en la docencia. Tradicionales: el aprendizaje es social; se aprende en la experiencia; el significado se construye internamente, como reflejo de su operación en una realidad concreta.
  • Su clave, tres dominios: Cognitivo (saber); conativo (hacer); afectivo (sentir). Todos son necesarios, son necesarios juntos y balanceados. Además, se dan en un contexto socio político.
  • El proceso de aprendizaje, un primer loop, instrumental: (1) experiencia; (2) reflexión; (3) generalización; (4) prueba. Un segundo loop, en donde hay (1) cambio de paradigma, (2) conocimiento que emerge; (3) nueva comprensión.
  • Para moverse del primer al segundo loop se necesita “energía” para comprometerse en el debate crítico.
  • Esa energía son las emociones. Las emociones son el “combustible” que potencia nuestras pasiones, batallas, comportamientos, racionalidad. A nivel neurológico, son las emociones las que generan, literalmente, energía.
  • A nivel universitario: indispensable el pensamiento crítico, como responsabilidad social. Para ello se requieren conocimiento formal (el saber), capacidad auto-reflexiva crítica (centro en la persona) y capacidad de acción crítica (el mundo).
  • El diálogo reflexivo permite transformar la relación del aprendiz con su disciplina, con sigo mismo y con el mundo. Estos tres elementos (saber, persona, mundo) vienen del concepto de pensamiento crítico de Barnett.
  • El pensamiento reflexivo requiere capacidades de autocrÍtica: automonitoreo y autoconfrontación.
  • Requisitos para que se de el pensamiento reflexivo: diálogo, intención, proceso, modelado y postura personal.
  • Hay diálogo interno y diálogo entre individuos. Y no todo diálogo es reflexivo. El reflexivo implica un cambio. El diálogo reflexivo debe estar basado en la experiencia, debe considerar lo subjetivo como lo objetivo, e involucrar personalmente al sujeto.
  • La toma de postura personal es eso, personal. Involucra a la persona, su contexto, historia. El aprendizaje es relacional, entre la persona con toda esa carga y la materia “externa”.
  • Intención, proceso y modelado son atributos que el docente debe trabajar en sus propuestas y apuestas sobre el pensamiento reflexivo.
  • Marco de Schön (que leeré en directo al leer a Schön) para knowing-in-action, knowledge-in-action y reflection-in-action, que suceden durante el acto de hacer.
  • Reflection-ON-action… implica poder hacer una buena reflexión sobre nuestra reflection-in-action (también de Schön). (1) Acción + saberes + knowlege-in-action + reflexión en la acción, (2) descripción de la reflexión en la acción, (3) reflexión sobre la descripcion de la reflexión en acción. Y hay otro nivel, cuando grupalmente se reflexiona sobre la reflexión de la descripción de la reflexión en acción.. amén...
  • Mi reflection-ON-action se convierte en mi knowledge-in-use.
  • El proceso reflexivo (el segundo loop) puede favorecer:
    • Reconocer el paradigma en el que he estado sin darme cuenta
    • Darme cuenta de que hay otros paradigmas
    • Cambiar mi paradigma
    • Entender y trabajar entre paradigmas.
  • Su CONCEPTO de pensamiento reflexivo: (1) buscan una reflexión que favorezca explícitamente el pensamiento crítico; (2) Implica pensar (cognitivo), sentir (emotivo) y actuar en el mundo real; (3) reconociendo el contexto social y político y los valores desde donde la persona vive.
  • Esa visión busca generar la reconceptualización, el cambio de paradigmas, la metacognición, el aprendizaje transformador porque tienen que ver con la razón de ser de lo universitario.
  • Clave: lo colectivo, diálogo reflexivo con otros, además del introspectivo.
  • Lo reflexivo implica: fuertes niveles de autonomía e independencia de pensamiento y de acción. Lo que exige al aprendiz se responsable de su propio aprendizaje.
  • El curriculum suele no ser compatible con todo esto. No suele relacionarse siempre con todo esto: “self”, “being”, “becomming”, acción, interacción, saber,  comprender, riesgo, exploración, emoción, interpretación, juicio, insight, valor, exponerse, atreverse, autenticidad, colaboración y diálogo.
Cosas de este marco que trabajo
  • El automonitoreo, la autocrítica, en los procesos de “autoevaluación”, “cierre de etapa”, aunque no es sencillo. Quizá si dejara de llamarles “autoevaluación” que tiene un referente ya instalado, podría mejorar (automonitoreo y autocrítica, me gustan).
  • La toma de postura personal. La ligo con su proceso profesional y sus códigos de ética.
  • Esa toma de postura personal implica que conocen más de una perspectiva y que por tanto pueden posicionarse en una concientemente. Implica no solo que ubican su contexto y valores, si no la historia, contexto y valores implicados en la materia que estudian y que ofrecen controversias muchas veces. Nada sencillo de trabajar, lo tengo como propósito relacionado con sus capacidades de análisis.
  • Después del trabajo con Francisco Ayala, me quedaron más claras las 3 patitas que los autores importan del pensamiento crítico (Barnett): cognición, acción, emoción. Las comprendí en una perspectiva de (1) me detengo y observo lo andado (acciones, saberes, emociones), (2) elaboro sobre ello, partiendo de la “emoción” (lo que te implica personalmente), (3) esa elaboración originada en lo personal, incluye saberes (cognición), (4) y mejor si después de escribir hago propuestas de acción y/o tomo postura personal explícita y contextualizada. Las trabajé más claramente en la última versión de TyS, haciéndolas explícitas la retroalimentación (y sin éxito en GRS).
Cosas de este marco para pensar, retomar.
  • Lo que yo trabajo cuando hablo de “reflexión” sucede solamente en tónica detenerse, mirar lo andado, encontrar el hilo personal y trabajar/escribir desde ahí. Ese “detenerse” de la experiencia ignaciana relativa al discernimiento. El marco de Schön que presentan refiere a un “en el momento”, cuando sucede la acción (“in action”). La reflexión en acción. No la trabajo así, pero apuesto a que el proceso de detenerse y etc… podrá volverse “in action” cuando esté más interiorizado. Lo alcancé a ver en Ariana en Ágora (no que fuera producto de su paso por el curso meramente, ella traía lo suyo, pero sí le sirvió para enriquecerlo). Más allá, el asunto es ¿hasta dónde puedo llevar el proceso hacia allá?
  • Yo me quedo en el proceso reflexivo personal. Incluso originalmente era privado. Ya es público, pero no trabajo una dimensión colectiva. Aquí hay algo por explorar. Sí trabajo la dimensión colectiva en el curso, en especial en la parte de reconocer otras posturas, los contextos, la historia, etc. ligado a abrirse a escuchar a los compañeros en sus visiones. Hay un tema especial relativo a las controversias también para ejercitar colectivamente esto de las diferentes posturas. Pero ahí no trabajan la dimensión afectiva, ni conativa… es casi meramente cognitivo.
  • Leer con más detalle:
    • El capítulo 5, en concreto el ejemplo (79 y ss.). Me sirve de modelo para la retroalimentación.
    • Mismo capítulo, la propuesta de Barnett sobre el practicante reflexivo (86 y ss.) (quizá habría que leer a Barnett directamente).
    • La parte 2 trae las propuestas de trabajo. En especial me interesan: del ch6, la evaluación (100-104) porque incluye una bitácora y un portafolio (que yo uso). El resto está muy centrado en educación presencial (educación, no aprendizaje) y estrategias que tienen sentido en lo presencial. Pero seguro saco provecho del ch 8 (127 y ss) sobre el diálogo reflexivo y los estudiantes; y el ch9 que deja de ver al docente como tal y lo ve como “facilitador” (145 y ss). Los ch 10 y 11 son más prácticos aún (pero muy presenciales, sobre todo el 10, hasta de cómo sentarte y los tiempos de escucha y habla y etc.).
    • La parte 3 ya no alcancé a verla.
  • También: leer directamente a Barnett y a Schön, porque dicen estos autores que se critican mutuamente o lo hacían en aquel entonces… Ver si hay cosas nuevas.

Buscando el libro que originalmente leí, encontré este otro cuyo foco son las organizaciones. Se ve interesante, dejo notitas.

Brockbank, Anne; McGill, Ian y Beech, Nic (eds) (2002). Reflective Learning in Practice, Aldershot, UK:Gower.
Definición de “aprendizaje reflexivo”: “proceso que involucra el diálogo con otros para mejora o transformación, reconociendo el contexto emocional, social y político del aprendiz”
  • Otra definición de “aprendizaje reflexivo”: “proceso intencional en donde el contexto social y la experiencia se reconocen, en donde los aprendices son individuos activos, completamente presentes, comprometiéndose unos con otros, abiertos a los retos, y en donde el producto involucra transformación al mismo tiempo que mejora tanto de los individuos como de su organización”.
  • Claves: el aprendizaje es activo; los aprendices usan sus experiencias para aprender; los aprendices construyen su propio aprendizaje en un contexto social; el aprendizaje reflexivo es holístico, enriquece el conocimiento y usa el diálogo.
  • Eso del dialogo abierto (más que el diálogo introspectivo) es propio de este libro para las organizaciones.
  • Para leer con calma:
    • Esta parte de lo colectivo. El diálogo con otros, etc. (ch 4; ch 5)
    • Las segunda y tercera partes del libro son casos de organizaciones que aprenden organizados en dos bloques (8 casos en cada capítulo). Puede ser interesante.


Imagen: https://www.researchgate.net/figure/46168431_fig3_Fig-3-Double-loop-learning-Brockbank-and-McGill-1998

Moon, el aprendizaje reflexivo y experiencial

Mis notas sobre el libro:
Moon, Jennifer A. (2004), A Handbook of Reflective and Experiential Learning. Theory and Practice, Londres y Nueva York: Routledge Falmer. 

    • Es un libro sobre ”aprendizaje”, reflexivo y experiencia. Es modo “constructivista” y centrado en el docente (le habla al docente). Tradicionales: el aprendizaje es social; se aprende en la experiencia; una experiencia externa dispara experiencias internas; el significado se construye internamente, etc.
    • Lo que finalmente determina lo que un aprendiz aprende y cómo se aproxima al aprendizaje es la experiencia. Y la experiencia no la podemos controlar, no podemos hacer que algo que diseñamos genere lo que queremos, porque la experiencia se vive personal.
    • Emociones y su relación con el aprendizaje.
Lo emocional es proceso.
Las emociones influyen la estructura de conocimiento. Influyen el proceso de aprendizaje. Pueden surgir en el proceso de aprendizaje. Emociones no directamente relacionadas con el aprendizaje en cuestión facilitan o bloquean el aprendizaje.
Hay insight emocional cuando la orientación emocional de la persona cambia porque la persona trabaja su emoción.
    • Su definición de reflexión (curiosamente ¡no incluye la emoción! A pesar de que declara que es central en otras partes): “Reflexión es un proceso mental que usamos ya sea para un propósito concreto, en donde hay un resultado esperado, o en modo “ser reflexivo” en donde no sabemos cuál es el resultado. Se aplica para situaciones complicadas, mal estructuradas o donde no hay soluciones obvias. Se basa en procesar más el conocimiento que ya tenemos.”
    • Los productos de la reflexión pueden ser aprendizajes, acciones, revisiones críticas, desarrollo personal/profesional, megacognición, creación de teorías, toma de decisiones, resolución de problemas, imágenes, ideas, emociones.
    • Aprendizaje experiencial.
Un circuito, círculo: experiencia; conceptualización abstracta; observación y reflexión; experimentación activa.
    • Reflexión y aprendizaje, lo que hice mío y mantengo en mente:
    • Crea un “espacio intelectual”, al raltentiza el proceso.
      • Este darse un respiro, yo lo ligo con emociones (algo dice la autora también) y más allá, con procesos “ignacianos”. Detenerse, poner en juego la emoción, observar, analizar (todo otro tema) y por sobre todo saborear. Saborear internamente de las cosas.
    • Importante para crear un sentido de pertenencia.
      • En el “esto es mío” para mí la emoción es clave. Ya sea porque elijo hacer algo “mío” porque de entrada me atra, o porque algo me brinca (atrae, repele, etc) y en el proceso de lidiar con eso, me involucro personalmente (y se vuelve mio).
    • Favorece la metacognición.
    • La reflexión es sobre “mi propio proceso”, es “mía”, es “primera persona”.
    • Pedir “reflexionen” no funciona, mucha gente no sabe qué hacer con eso. Tiene un marquito que uso para acompañar el proceso de desarrollar su escritura reflexiva. 4 etapas (1) “escritura descriptiva” (no hay reflexión, solo se narra sin discusión); (2) “reflexión descriptiva” (se narran los eventos, pero aparecen y aparece alguna discusión de éstos, normalmente desde una sola perspectiva; (3) “reflexión dialógica” (ya no se requiere narrar los eventos, se habla del asunto con diferentes perspectivas, pueden aparecer juicios y explicaciones alternativas, aunque puede ser aún inconsistente; (4) “reflexión crítica” (demuestra que actos y eventos pueden explicarse desde diferentes perspectivas, que están anclados local e históricamente”.
      • Su marco es muy cognitivo. De hecho en TyS ligo ese proceso con el propósito de “análisis” (no el de “reflexión”)
      • Ese marco clave no trabaja las emociones.Yo lo intento vía “elige de qué quieres hablar” (no hay un “reflexiona sobre esto”).
      • No me funcionó en GRS.
  • Cosas nuevas, que no recordaba, del texto, y me parecen relevantes:
    • No tenemos vocabulario apropiado para las emociones (en ese sentido, las emociones “como objeto de estudio” se vuelven relevantes).
    • El pensamiento reflexivo requiere capacidad para pensar en lo abstracto.
    • Para el pensamiento reflexivo se requiere cierto nivel de autonomía del aprendiz.
    • También se requiere de inteligencia emocional, reconocer cómo las emociones afectan los juicios y los marcos de referencia que adoptamos.
  • Para volver:
El lbro es un “handbook”, tiene mucho material para trabajar. Para regresar (tanto para la reflexión, como lo que yo incorporo bajo el título de “habilidades de análisis):
    • Cómo presentar la reflexión (pp 135-142)
    • Caso de estudio: aprender del trabajo reflexivo (pp 163-168)
    • La comparativa entre “escritura reflexiva” y “reporte o ensayo” (pp 190-191)
    • Los ejemplos de formas distintas de narración de lo mismo (niveles de escritura reflexiva diferentes), para construir algunos más específicos (pp 196 y ss.; 204 y ss; 217 y ss).
    • Las preguntas para retroalimentación, en donde hay algunas que uso y refieren a las emociones, pero otras ya las tenía olvidadas (pp 201-211)
    • La especie de rúbrica (pp 214-216).



      (c) Barbara Sen- http://www.slideshare.net/infolit_group/supporting-information-literacy-educators-reflective-pedagogic-planning-improving-information-literacy-practice-pam-mckinney-barbara-sen


       





Pensamiento reflexivo y aprendizaje en red...

Pensamiento reflexivo y aprendizaje en red... es una inquietud que traigo. No la abordo en esta entrada... más bien, vienen varias entradas del proceso de acercarme a esa inquietud. Inicio con lo más desordenado de lo desordenado... la historia personal que me tiene hoy en esta inquietud.


Cuando aprendí el concepto de la “metacognición” (con más formalidad en la especialidad en educación cognitiva) me fascinó… trabajé mucho en torno a ello, personalmente, en mi docencia, en el trabajo de la academia SAI (hicimos como colectivo un artículo para el Foro de Innovación sobre el SAI que incluía entre los elementos la metacognición).
Una clave de la metacognición es la reflexión.
Trabajando la materia de Tecnología y Sociedad, en especial la parte más ignaciana que COP diseñó en torno a los procesos personales de los chavos, empecé a explorar el concepto de reflexión. Se instaló en esa materia como una clave transversal. Tanto me “engolosiné” que en su momento convertí el desarrollar habilidades de escritura reflexiva (pensamiento reflexivo) en uno de los propósitos del curso… con elementos muy básicos.Toda esta parte fue sin referentes teóricos, más allá de las charlas sobre la experiencia ignaciana de COP.
En en el 2011 intenté formalizar más el trabajo (antes de convertirlo en propósito del curso, cuando solo era actividad). Buscando algunas referencias y leyendo sistemáticamente la experiencia de escritura reflexiva del 2010, se publicó articulito en Apertura.
Con esa experiencia propuse a la academia de TYS retomar la escritura reflexiva como un proyecto conjunto de la academia. Presentamos la propuesta (COP, Efrén y yo) en el último Foro de Innovación Educativa (2011). Pero no trascendió (COP se jubiló, nos salimos del DESI, la academia se incorporó a otra que tenía otras prácticas, Efrén dejó la materia). Así que dejé la exploración más formal y colectiva y seguí con un proceso más en solitario.
Pasaron los años hasta que felizmente esta nueva academia (que no sé cómo se llama y tiene más materias) en algún punto se interesó en mis reflexiones sobre lo reflexivo y decidimos convertir el tema en uno de estudio colectivo del 2015. Se invitó a Francisco Ayala a acompañarnos y le pasamos mi artículo (ya viejo). El proceso estuvo muy padre porque regresé a mis propios procesos, y aprendí de lo que Paco veía en mi artículo. Cosas que no sabía y otras que retomé y que tenía olvidadas.
Para estas fechas, claro, ya teníamos avanzadas en el CAR experiencias en torno al concepto “Aprendizaje en RED”, que incluye (pero siempre he insistido no se agota en) el famoso AIDA de Downs  (y aquí), (¿y Siemens?), que viví en el CCK11 (Connectivims and Connective Knowledge, la última edición del primer MOOC del par). En el CCK11 (que no terminé) yo me pelié mucho por la falta de espacios para la construcción colectiva, y su super centro en el proceso individual, que busca conectarse, pero individual. [Cosa aparte, el “busca conectarse” no es sencillo, es todo un tema]. Cuando llegué al TRAL (la versión Diego Leal del CCK11) en 2014 me atraía mucho que había una sección sobre “comunidades”, quizá porque Diego también encontró ese hueco. Pero no me convenció la aproximación, “pensé” sobre lo comunitario y lo colectivo, pero no sucedió nada en esa tónica con el grupo [no había “grupo”, realmente, todo otro tema, la construcción de grupo].
Y por otro lado, cuando fuimos al paraninfo a escuchar a Downs hace poquito, nos dejó (o al menos a mí), la duda sobre todo lo que ellos ponen en el término “interacción”. Acá se había construido que al AIDA le hacía falta una “C”, de “colaboración”, que como con todos los términos, usamos sin discutir a profundidad. La duda era ¿será que lo que nosotros entendemos sobre “colaboración” es muy cercano a lo que Downs/Siemens entienden por “interacción” -que ellos llaman “connectivity”? Y de ahí me surgió la necesidad de volver a leerlos en original, al par, en estos conceptos y en lo profundo del conectivismo (no quedarnos con la receta), y en lo que han armado después, porque dejé de seguirles la pista.
En el proceso del CAR aprende reciente, y la siempre aparición de C-AIDA como el referente “neta” del “aprendizaje en red”, me brincó también el asunto de la falta de una “R”, sobre el pensamiento reflexivo en ese marco. Como duda. ¿Está contemplado el pensamiento reflexivo en el marco del connectivismo? 

El primer bordadito, ordenar con “puntitos”, para entrarle es en recuperar dónde estoy. Voy a ir las cosas que he leído a la fecha primero y leerlas con nuevas preguntas. Aquí dejo el índice. Esta entrada la iré editando conforme avance en estas notas.




REFERENCIAS
OrtizMichel, Gabriela (2001). La escritura reflexiva como un recurso de aprendizaje para un curso semipresencial. Apertura. 3 (1). Accesible en: http://www.udgvirtual.udg.mx/apertura/index.php/apertura/article/view/185
Lepe Caamaño, Efrén Gilberto; OrtizMichel, Gabriela y Orozco Pointellin, Carlos Ricardo (2011). Escritura reflexiva: una estrategia para el proyecto personal centrado en la persona. ITESO. Foro de Innovación Educativa 2011. Accesible en: https://drive.google.com/open?id=0B4inZ_GKQ8phQ1dfNmJQWDhsQVE

[PS. Sobre la relación entre las dos cosas con las que me “peleo” de la forma en la que vamos apropiando el marco del conectivismo: lo colectivo y lo reflexivo: En lo reflexivo el centro es la persona. No hay pensamiento reflexivo sin persona. Sin su ser, sus emociones, su hacer, su contexto, su cognición. Para podernos relacionar con otros, para lo colectivo, es indispensable ir por frente como persona. En esta parte en que decidí acercarme a lo reflexivo, estaré en eso, lo reflexivo. No en lo colectivo pues, pero quiero dejar esta nota aquí porque las conexiones son importantes]